sábado, 15 de marzo de 2008

PROBLEMATIZACIÓN DEL FUNCIONAMIENTO DE LA RELACIÓN CLASE, GÉNERO y ETNIA EN LAS MUJERES

Ayer pasaba por una calle riendo con otras, un hombre se atrevió a decirnos que si las mujeres se ríen mucho se les puede caer los dientes. Es una de las ofensas más recientes que he escuchado. Si solo de risas se tratara, tal vez, habríamos de haberle contestado que era un pobre amargado y retrogrado, pero es preciso ir más allá, la pregunta sencilla que surge, es ¿porqué se atrevió a decirnos eso?, si estábamos riéndonos de lo más delicioso ¿porqué pasan estas situaciones?, ¿hechos de esta naturaleza son pie para explicarnos una realidad más profunda? o simplemente nos envolvemos en el silencio histórico que nos caracteriza a muchas mujeres para que no nos digan “exageradas” o quedamos en la constatación de que a veces no tenemos oportunidad de ejercer ni los más mínimos derechos a la libertad en los espacios públicos...

Pues NO, es desde esos acontecimientos que hay que subvertir el orden y es un reto aprender a hacerlo, porque situaciones así no son esporádicas, cuando tienes conocimiento de peores hechos ocurriendo cada minuto en el íntimo de cada mujer como en sus cotidianos acontecimientos públicos, entonces la magnitud y las afectadas somos miles. Entonces una agresión “ocasional” pasa de ser una digresión individual de alguien que se quedó en los muros de los frailes del medioevo y se convierte en una condición social que el feminismo ha definido desde hace muchos años como dominación sexual.

Si las y los seres human@s estamos siendo afectadas por prácticas neoconservadoras e injustas esas prácticas son los motivos exactos, propicios para PROBLEMATIZARNOS, preguntarnos qué pasa, para denunciar esos hechos y utilizar los medios que nos permitan nuestras fuerzas y construir un andamiaje capaz de colocar en el debate público, sobre la mesa de juego, los acontecimientos que no nos permiten vivir con dignidad.

Debido a que la magnitud de la dominación sexual es tan basta y en movimiento, que encarna la producción y reproducción del inconsciente y del conciente de cada ser humano, es una estructura de vida, una cultura de poder de la que nadie escapa, requerimos aproximarnos en la medida de lo posible para explicarnos su lógica, su funcionamiento e historicidad, la dimensión de su aguda brutalidad y poder para asumir otra práctica de vida.

Ese horizonte nos hace capaces de percibir sensiblemente que las mujeres no solo vivimos una contradicción y que la contradicción sexual no es la única que atraviesa nuestras vidas y que existen otras, de profundas dimensiones expresadas en las contradicciones de clase, las étnico-raciales, las generacionales, las de destrucción ecológica, etc., que han comprometido en un escenario de muerte global no solo a las mujeres sino a todo al mundo. Aproximarnos a nuestra propia vida desde el entramado múltiple de contradicciones se vuelve sumamente complejo, y por eso, también complejo encontrar alternativas de carácter integral.

Desde el feminismo que vivimos, estamos concientes de que requerimos abrir varios procesos que nos permitan ubicar por dónde podemos articular alternativas de vida.

El espacio que estamos construyendo en la Revista Feminista para abordar algún tema concreto, en mi caso, avanzar en la “Problematización del funcionamiento de la relación clase, género y etnia en las mujeres”, sería el espacio de involucramiento de este decir colectivo que estamos creando juntas.

Metodológicamente, la idea es aplicar un proceso de observación en los espacios más comunes, las reuniones, los talleres, las movilizaciones, etc., en que por ahora se produce el contacto entre organizaciones feministas, de género y la Casa feminista de Rosa. Además, ubicar ciertos espacios que parezcan concentradores de la problemática sexual, grupos que experimenten el cuerpo, la erótica y el desnudo.

Hay muchas razones para que las mujeres fragmentemos las contradicciones, sin embargo, por ahora, me interesa empezar por estas preguntas parciales: ¿por qué las mujeres no logran articular y relacionar las contradicciones mencionadas?, ¿por qué la tendencia a la unilateralidad política?, ¿por qué se produce el proceso de sustitución de contradicciones por el que aparece una y se invisibiliza otras?, ¿el particularismo es cuestión de estrategia política?

Luego, realizaría una primera sistematización de lo observado y la lectura de algunos textos complementarios.

Con el Grupo de Investigadoras, Talleristas y Promotoras de la Revista Feminista, hemos decido que vamos a asumir una metodología en construcción. En este sentido, cabe indicar dos aspectos:

a.- Buscamos arribar, crear horizontes, visionar desde los acontecimientos diarios a los que nos aproximamos con la investigación, con quienes “son semejantes” por condición social de opresiones y explotaciones múltiples, iniciando el punto de partida desde las mujeres, hacia el compromiso por aprender a vivir otra vez.

b.- Aproximarnos al campo diferente y particular de lo “subjetivo y objetivo femenino” desde el feminismo, crítico, diverso, de izquierda, que se plantea no solo un nuevo espacio público para mujeres y hombres, no solo democracia en la cama y en la casa, Queremos un feminismo, que partiendo de una mirada individual y colectiva, una práctica de vida de algunas mujeres, pase a enlazar posibilidades para construir otra humanidad, por ahora, muchas maneras de vivir, basadas en el amor y la critica profunda al sistema capitalista, patriarcal, racista...

Por: Margarita Aguinaga